El segundo día de esta campaña de Somosaguas 2024 ha sido muy agradable. Uno de los hallazgos más sorprendentes de la jornada fue descubrir un hormiguero, completamente desarrollado y con numerosas larvas, dentro de un molar de Gomphotherium angustidens. ¡Quién diría que la naturaleza podría reutilizar restos fósiles de una manera tan creativa! Este molar, que perteneció a un antiguo pariente de los elefantes, ha sido reciclado por la fauna actual, transformándose en un hogar para una colonia de hormigas. Este tipo de observaciones nos recuerda constantemente cómo los procesos de la naturaleza nunca se detienen, incluso en fósiles de millones de años. A nivel tafonómico, esto sería muy interesante de estudiar, al estar el fósil nuevamente sufriendo alteraciones en la etapa bioestratinómica tras su exhumación... en fin, no os queremos aburrir.
No tenemos noticias de la Cata-2, esperemos que estén bien...
Otro logro destacado del día ha sido la recuperación de un fósil de 2019. Este fósil, que ha pasado años expuesto a los elementos, fue tratado con mucho mimo y cuidado para evitar su deterioro durante su extracción. Logramos salvarlo y está ahora a salvo para su estudio futuro. ¡Que viva el Paraloid!
Continuamos trabajando en la excavación de una asociación de Gomphotherium angustidens, que incluye varios molares, un hueso largo y lo que podría ser o la mandíbula o el maxilar. Aunque este conjunto es de gran valor, está en muy mal estado de preservación. La razón: una acumulación considerable de calcretas que han afectado negativamente a los fósiles. Será un desafío restaurarlos, pero el equipo está preparado para intentarlo con todo el cuidado posible.
Hoy también tuvimos la grata visita de Ana y Ada, quienes vinieron a echar una mano en el trabajo. Nos ayudaron a retirar montículos de arena que habíamos acumulado para refrescar la geotrinchera a finales del curso pasado. Su apoyo fue muy valioso y nos permitió avanzar más rápido de lo esperado.
Como en todo buen equipo de excavación, las conversaciones fueron tan fascinantes como los hallazgos. Destaco especialmente una intensa discusión sobre las princesas de Disney y, más curiosamente, sobre las biozonas en El Señor de los Anillos. Según Manuel, Ithilien es claramente un bosque mediterráneo, y no puedo decir que esté en desacuerdo. Es asombroso cómo los mundos de la paleontología y la cultura pop pueden entrelazarse en nuestras charlas diarias.
Seguiremos excavando, descubriendo fósiles y teniendo conversaciones tan o más interesantes que las de hoy. ¡Nos esperan más días emocionantes!
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